sábado, 25 de agosto de 2007

El ángel caido

Al mismo Dios que rezas,
es a quien yo sirvo.
Soy su azote, y verdugo.
Soy la espada de fuego que empuña su ira.

No, no deberías estar rezándole más
Yo soy su fuerza,
fuerza nacida de la ira que alimentan vuestros pecados,
Y es su voluntad que: yo, venga a cobrar tus deudas.
Tal vez en la tierras de Hammurabi, terminen todos ciegos,
y tal vez la ley de Hammurabi, sea sanguinaria.
Pero tal vez no quiera ver,
tal vez solo quiera sangre y muerte.
Tan solo quiero sangre y venganza.


Es el fanatismo extremo, que sin contemplar contra quien arremete, arroya todo lo que a su paso se encuentra.
Es la ley de Hammurabi:
Ojo por ojo, diente por diente.
Con la Ley del ojo por ojo terminaremos todos ciegos, y tal vez, la primera en quedarse ciega por ello fue la Justicia, pagándose como prenda inocentes, a las deudas de los culpables.

lunes, 20 de agosto de 2007

melodía del pasado y futuro ( decadencia)

La caída de Roma se precipita ante nosotros. La república griega hace ya siglos que fue sometida al imperio. Y ahora el Imperio se estremece ante los pueblos bárbaros. Roma desgastada por los capricho de su dueño y señor, se va quebrantando. El trono que arrebato el poder de la democracia griega, ahora lo pierde ante mercaderes enriquecidos que forjan su yugo en el temor e ignorancia del pueblo. La mano que mantenía unida al imperio pierde su fuerza, y los chacales vienen a carroñera los restos. La ilustración, ciencia, el amor a la sabiduría que tenían los griegos, arte y esplendor de una cultura decadente retroceden y se marchitan ante la ley del más fuerte. Cada vez menos son los eruditos, y aunque clérigos siembren la poca cultura que queda por todos los continentes, son pocos los que quedan para recordarla, muchos para someterla y escasos la que la escuchan. La democracia griega esta ya muerta, y cuando más se debilita el temor al antiguo imperio, mas hienas saltan a carroñar su antiguo poder. Ya no importa nada, solo ser el nuevo rey, el imperio se hunde, y su cultura con él.
Primero llegó la guerra por el poder, que trajo con sigo a el hambre. Si nuestros campesinos son guerreros, y nuestras cosechas están quemadas,¿ de que vamos a comer? Sacudiendo al pueblo para alimentar a los guerreros, y ya debilitado es presa fácil de la enfermedad, que sin ciencia que la detenga, cabalga y galopa segando la vida de media Europa.
Los vientos del tiempo pasan, el hambre pasea
El hambre asedia al mundo, la guerras santas, ya sea inculcada por un dios, por el amor a la patria, o por el amor al petroleo. Labores humanitarias se lanzan por todo el planeta, y la parte del mundo empobrecido llega al culturizado, y no deja atrás su depresión, sus costumbres violentas y discriminantes, y en el mundo supuestamente civilizado, asoman sus hocicos, chacales que se alimentan de reprimir a mas humanos.
Ya nadie ama el arte, ya nadie ama la sabiduría, ya no se respeta al prójimo, ya solo se odia.
Tal vez, esta pequeña red permita unir las mentes de los que buscan algo más que someter a los demás.